viernes, 28 de junio de 2013

EL EGOISMO

El egoísmo moral, o egoísmo ético, es una doctrina ético filosófica que afirma que las personas deben tener la normativa ética de obrar para su propio interés, y que tal es la única forma moral de obrar, sin embargo permite realizar acciones que ayuden a otros, pero con la finalidad que el ayudar nos dé un beneficio propio tomándolo como un medio para lograr algo provechoso. Afirma que la validez de una teoría o praxis se encuentra en su aportación directa a la edificación positiva y responsable del yo o desarrollo personal.
El egoísta moral se basa en la afirmación de sí mismo; que lo convierte en su propio soberano al volverlo consciente de su realidad moral y personal. La realidad es la de su propia existencia y su vivir en una realidad determinada. Está vinculado a la dimensión moral de formas de subjetivismo o solipsismo radical.
Tres diferentes formulaciones del egoísmo ético o moral se han identificado:
  • Individuales. Un egoísta ético individual celebraría que todas las personas deben hacer lo que les beneficia.
  • Personales. Un egoísta ético personal afirma que él debe actuar según su propio interés, pero no hace aseveraciones acerca de lo que los demás deberían hacer.
  • Universales. Un egoísta ético universal argumenta que todo el mundo debe actuar de una manera que sea en su propio interés.
Una filosofía que sostenga que se debe ser honesto, justo y benévolo, porque esas virtudes le sirven al beneficio propio es filosofía egoísta; sostener que esas virtudes deberían practicarse por razones que no sean de interés propio no es filosofía egoísta.

LA IMPUTABILIDAD


Se entiende por imputabilidad
el conjunto de condiciones determinadas por lamadurez psíquica y la salud mental de un sujeto, condiciones que le permiten a esterepresentarse su deber jurídico y obrar conforme a dicha representación.
No se trata propiamente de un elemento del delito independiente, sino más bien unpresupuesto de otro: la culpabilidad. En efecto, si la culpabilidad es un juicio de reproche quepuede realizarse respecto de un individuo que, pudiendo comportarse conforme a Derecho nolo hizo, es preciso que, previamente, reúna las características suficientes para comprendercuales son sus deberes y poder actuar en conformidad a ellos. Formular un juicio de reprocherespecto de individuos que no reúnan tales características es una impropiedad; nadie puederealizar aquello que le es imposible.Por otra parte, hay que tener en consideración que el término imputación significaatribuir algo a alguien, es decir, es un concepto que en un sentido jurídico consiste en hacercargo a un individuo de un acto cometido por él, pero para hacerle responder de lasconsecuencias jurídicas que dicho acto trae consigo. Volviendo al concepto de imputabilidad entregado, podemos observar que su exigencia esdoble y copulativa:1.
 
 Valoración de los deberes.2.
 
Determinación de la conducta con arreglo a esos deberes.Un sujeto puede ser sano mentalmente o tener madurez mental para conocer orepresentarse sus deberes; pero no puede determinarse por esas normas. Es la situación quepresentan los menores de edad. Esa es la razón de su inimputabilidad

HUMILLACIÓN Y CULPA

HUMILLACIÓN
Muchas personas recurren al uso de la humillación o el desprecio en sus relaciones, ya sea con sus parejas, hijos u otros miembros de la familia. Lo peor de todo es que no siempre son conscientes de que lo están haciendo y el uso de estos gestos de desprecio parece que va en aumento en nuestra sociedad en la educación de los hijos.
Hay muchas formas de hacer que una persona se sienta despreciada, humillada y avergonzada. Algunas son muy claras, como insultar a alguien, decirle que no vale para nada, que no sabe hacer nada bien o que es un fracasado. Otras, en cambio, son mucho más sutiles. Si le dices a un niño una frase aparentemente tan inocente como "deja de hacer ruido", no parece haber problema alguno, pero si esa frase va acompañada de un gesto de asco y desprecio, que el niño o niña percibe perfectamente, entonces tal vez te encuentres con que ese niño lanza violentamente contra el suelo el objeto con el que supuestamente estaba haciendo ruido. Por supuesto, te quedas con la boca abierta ante esta reacción que parece exagerada y fuera de lugar. ¿Qué ha pasado?
Tras ver el gesto de desprecio, el niño se siente humillado y avergonzado. Ese gesto implica una retirada del afecto, un "no me gustas porque no eres lo bastante bueno". Eso genera un sentimiento de vergüenza. Pero la vergüenza es la emoción más desagradable e insoportable de todas las que existen. De hecho, no somos capaces de sentirla de manera sostenida. Enseguida hacemos algo para eliminarla, como olvidar lo sucedido, o bien da lugar a otra emoción. Y las dos emociones más habituales a las que da lugar la vergüenza son la tristeza (o depresión, en su polo más extremo) y la ira (o rabia). Y es precisamente esa ira la que lleva al niño del ejemplo a reaccionar de esa manera.
Pero eso no solo sucede en las relaciones entre padres e hijos, sino también en las relaciones de pareja o en cualquier otro tipo de relación. Cuando te encuentras con reacciones que parecen ser exageradas, es probable que debajo de ellas se encuentre una persona que se ha sentido humillada y avergonzada. Si te das cuenta de que tu forma de hablar o tus expresiones faciales están transmitiendo desprecio hacia la otra persona (incluso aunque no lo hagas a propósito) serás mucho más capaz de empezar a cambiarlas y a relacionarte con los demás de un modo más sano.
Y si tú estás teniendo estas reacciones, el caso puede ser exactamente el mismo. Tal vez necesites decirle a esa persona lo que sientes, puesto que puede que no sea consciente de que te está tratando con desprecio. Y si lo hace a propósito tal vez debas platearte la posibilidad de dejar una relación que puede ser muy destructiva.

CULPA:
 A esta teoría se le han formulado diversas críticas, lo que no implica que no se reconozca que el concepto de previsibilidad desempeña un papel de importancia en la culpa, sino tan solo que ese elemento no puede considerarse como suficiente para servirle de fundamento, dado que en otras razones, aun siendo previsible el resultado, puede no darse la culpa, si el sujeto ha actuado con la debida diligencia y prudencia.


MOTIVOS,INTENCCIONES,ACCIONES,CONSECUENSIAS,ETC...

Desde hace ya algunas décadas se han multiplicado las voces, sobre todo entre filósofos y teóricos de la literatura, que consideran estéril y absurdo seguir planteándose las tradicionales cuestiones hermenéuticas relacionadas con la autoría o el sentido válido de los textos. Cabe preguntarse, no obstante, hasta qué punto el desprestigio de la intencionalidad del autor o del sentido primario del texto no tendrá que ver con una cierta confusión en el uso de nociones claves, tales como significado, motivos o intenciones. Sólo partiendo de la clarificación de estos conceptos puede acaso plantearse si merece la pena y sigue existiendo la posibilidad de distinguir entre interpretaciones más o menos aceptables o descabelladas de los textos literarios y filosóficos.

EL MAL & EL-- DOLOR-- :´(

 EL MAL

 es complemento del bien y a la vez su contrario...
Es el resultado del cero dando origen al uno...
Cero multiplicado por infinito, es igual a uno...
Cero es el mal, uno es el bien...
Cuando el uno era átomo y encendió su primer fotón, se hizo la luz...
En el universo primigenio se produjeron cambios transformadores a nuevos estados de la materia...
El dolor es producto de cambios en un estado de consciencia con conocimiento del bien, pero atraída por el mal...






 EL DOLOR

 es relativo pues se circunscribe a la interpretación que se le da al mal y al bien...
Si hacemos el bien, sufrimos..
Si hacemos el mal, también sufrimos..
Todo ello como una ley que toda evolución o transformación, produce dolor...

EL BIEN Y LA ALEGRIA

LA ALEGRIA
La alegría es algo simple, pero no sencillo. Es simple apreciar si una persona es alegre o no, y la forma en la que ilumina a los demás, sin embargo tratar de ser una persona así no es sencillo. La alegría es un gozo del espíritu. Los seres humanos conocemos muy bien el sufrimiento y el dolor, y quienes han perdido a un ser querido lo han experimentado en toda su profundidad. Bien, pues así como el ser humano conoce el dolor y el sufrimiento, es capaz de tener las sensaciones opuestas: bienestar y... ¿Felicidad? Sí, felicidad.

Sin embargo la alegría es distinta del dolor, pues el dolor generalmente tiene causas externas: un golpe, un acontecimiento trágico, una situación difícil. Y la alegría es exactamente al revés, proviene del interior. Desde el centro de nuestra mente, de nuestra alma, hay un bienestar, una paz que se reflejan en todo nuestro cuerpo: sonreímos, andamos por ahí tarareando o silbando una tonadita, nos volvemos solícitos... El cambio es realmente espectacular, tanto que suele contagiar a quienes están al rededor de una persona así.

La alegría surge, en primer lugar, de una actitud, la de decidir cómo afronta nuestro espíritu las cosas que nos rodean. Quien se deja afectar por las cosas malas, elige sufrir. Quien decide que su paz es mayor que las cosas externas, entonces se acerca más a una alegría. Una alegría que viene desde de adentro.

La fuente más común, más profunda y más grande de la alegría es el amor, particularmente el amor en pareja. ¿Quién no se siente alegre cuando recién conoció a una persona que le gusta? Aún más ¿Quién no ve el mundo diferente cuando se da cuenta de que esa persona, además, está interesada en nosotros? El amor rejuvenece y es una fuente espontánea y profunda de alegría. Ese amor es, efectivamente, el principal combustible para estar alegres. Quien no ama, no ríe. Y es por eso que el egoísta sufre, y nunca está alegre.

Si nos hiciéramos el propósito de enumerar una serie de motivos para no estar alegres, encontraríamos: levantarse todos los día a la misma hora para acudir al trabajo, a la escuela o para reiniciar las labores domésticas; convivir con las personas que no son de nuestro agrado; enfrentarse al tráfico; preocuparnos por ajustar nuestro presupuesto para solventar las necesidades primordiales y además pagar las deudas; estar pendientes de la seguridad y bienestar de la familia; trabajar exactamente en lo mismo que hicimos ayer, y todo aquello que de alguna manera se parece a la vida rutinaria. Esto sería lo mismo que llevar una vida fría y con un gran toque de amargura.

Pocas veces pensamos en el hecho de estar alegres, pues en algunos momentos la alegría surge de manera espontánea por diversos motivos: una mejor oportunidad de trabajo, la propuesta para emprender un negocio, el ascenso que no esperábamos, un resultado por encima de lo previsto en los estudios... y dejamos que la vida siga su curso, sin ser conscientes que a la alegría no siempre se le encuentra, también se le construye.

Tampoco es válido pensar que la solución consiste en tomar con poca seriedad nuestras obligaciones y compromisos para vivir tranquilamente y de esta manera estar alegres. La persona que busca evadir la realidad tiene una alegría ficticia, mejor dicho, vive inmerso en la comodidad y en la búsqueda del placer, lo cual dura muy poco.

¿Qué se debe hacer para vivir el valor de la alegría? Para concretar una respuesta, primero debemos ver lo bueno que hacemos con esfuerzo y cariño:

- El trabajo que todos los días haces en la oficina o en el negocio. Aunque siempre sea el mismo, beneficias a otras personas y por consiguiente a tu familia y ti mismo. El hacerlo bien te da la seguridad de mantenerlo y de tener una fuente de ingresos.

- El cuidado que tienes para tu familia. Si eres padre o madre de familia, tienes la satisfacción de proporcionarles educación, alimentos y cuidados a tus hijos. Te da gusto verlos aseados y contentos. Haz tenido la capacidad de no adquirir algo para tu uso personal con tal de comprarles ropa, libros, zapatos o algún juguete. Como hijo, haces que tus padres se sientan orgullosos al ver tus éxitos en los estudios, el deporte o cualquier sana afición, de estar pendiente de no provocarles un disgusto o una pena como consecuencia de malas amistades, el alcohol o la droga.

- El tener amigos. Cada vez que los visitas por enfermedad, les ayudas en una mudanza, te das tiempo para platicar de sus problemas y darles consejo, o si sabes de mecánica te ofreces para hacer una pequeña reparación, salir a comer o convivir mediante algún deporte.

- El vivir en armonía con la sociedad. Mantener buenas relaciones con tus vecinos, ser aceptado por mostrar educación y respeto, el cuidar la limpieza fuera de tu casa, procurar que existan centros de sana diversión cerca del lugar en el que vives, o si participas en alguna iniciativa de ayuda a los más necesitados.

¿No es todo lo anterior motivo de gozo y de satisfacción interior?



El valor de la alegría está alejado del egoísmo porque todas las personas están primero que la propia, es saber darse sin medida, sin interés, por el simple hecho de querer ayudar con los medios a nuestro alcance.

Cada vez que realizamos algo bueno, con sacrificio o sin él, con desprendimiento de nuestra persona y de nuestras cosas, nos inunda la paz interior porque es la alegría del deber cumplido.

Lo que más apreciamos en la vida se debe al esfuerzo que pusimos para alcanzarlo, estudiando con intensidad, preparándonos para trabajar más y mejor, y los beneficios a obtener serán consecuencia de ese empeño.

El tener vida ya es motivo suficiente de alegría, aún el las circunstancias más adversas, estamos en condiciones de hacer algo positivo y de provecho para los demás, "es hacer el bien, sin mirar a quien". Disfrutar de lo poco o de lo mucho que tenemos sin renunciar a mejorar, mientras tengamos vida, tenemos posibilidades. Toda persona es capaz de irradiar desde su interior la alegría, manifestándola exteriormente con una simple sonrisa o con la actitud serena de su persona, propia de quien sabe apreciar y valorar todo lo que existe a su alrededor




EL BIEM 
 
El bien es el valor otorgado a una acción de un individuo, es una inclinación natural a fomentar lo deseable, motivado por una comprensión del entorno, de las personas (por ejemplo a través de un profundo ejercicio de la empatía) y/o de uno mismo. Un conjunto de buenas acciones (acciones bien ejecutadas) que propugnan lo bueno para el propio individuo.

Algunas religiones, como la judía y la cristiana, contemplan la historia del mundo como una lucha histórica entre el Bien y el Mal ( como una lucha entre Dios y Satanás). De ahí que se promueve la virtud, como camino del Bien, y se combate al pecado, como camino del Mal. Incluso las profecías bíblicas predicen, para el futuro, el triunfo definitivo del Bien sobre el Mal.

LA RELACIÓN DE LA LIBBERTAD Y RESPONSABILIDAD

¿Qué es ser libre?

No es fácil definir qué es ser libre, pero sí es fácil saber cuando no se es libre:
  1. No somos libres cuando actuamos por reflejo o siguiendo instintos. La mayor parte de las especies animales no son libres pues actúan siguiendo reflejos o instintos. Mediante la inteligencia podemos aprender, cambiar nuestra conducta según la situación.
  2. No somos libres cuando actuamos movidos por intensas emociones. La mayor parte de animales con alguna inteligencia actúan movidos por emociones básicas (miedo, enfado, disgusto, etc.). Mediante la inteligencia, la memoria y la voluntad podemos dominar o al menos prevenir que las emociones nos dominen.
Podemos decir que somos libres cuando:
  1. Usamos nuestra inteligencia en lugar de nuestros instintos: gracias a que somos inteligentes podemos actuar de distintas maneras según cada situación.
  2. Usamos nuestra inteligencia en lugar de estar dominados por nuestras emociones: gracias a que somos inteligentes podemos actuar movidos por sentimientos, deseos y planes que hemos creado nosotros mismos.

En definitiva: somos libres gracias a que somos inteligentes y podemos dirigir nuestros actos según nuestros pensamientos.


QUE SIGNIFIA EL SER HUMANO LIBBRE

Ser libre es poder elegir, es decir, eligir que hacer por ti mismo y sin influencia de los demas.

*Esto recien lo he estudiado yo en clase de Ética y pues al principio fue un poco complicado, pero no es tan dificil.

Ser libre significa en primer lugar tener ausencia de coacciones externas e internas que impidan nuestra capacidad de eleccion, es decir, no tener influencia de las personas ni de los sentimientos.
Somos realmente libres mediante un proceso de liberacion, ya que no es facil y requiere un esfuerzo,
pues en el momento en que dejamos de seguir lo que nos dicen nuestros padres y somos suficientemente maduros y responsables para elegir por nosotros mismos y hacerlo de manera correcta, en ese momento somos libres.


*La gente se confunde y cree que ser libre es hacer lo que uno quiere, pero no es eso, sino poder elegir responsablemente una cosa u otra.
Tienes razon al pensar que la libertad esta asociada a la responsabilidad.

COMO JUSTIFICAR LA ACCCIONES


El vocablo justificar es un término que significa absolver, declarar justo, o proporcionar sentencia favorable sobre una actuación. La palabra adquiere su sentido a partir de lo justo. Lo justo es lo realizado conforme a la Justicia bien sea entendida ésta como ley o como virtud.
De manera general podemos distinguir dos formas de justificación:
Justificación activa: En la que el individuo justifica sus actos ante una autoridad, ante sí mismo o ante los demás como justos. Justificación pasiva: En la que una autoridad (juez, autoridad civil, el padre, el profesor etc.) justifica los actos de alguien como justos o conforme a leyes o conforme a usos y costumbres.
Tanto en un sentido o en otro, como ley o como virtud, el término se aplica por analogía en numerosos contextos y situaciones, frente a diversas formas de autoridad legítima o legitimada y diversos métodos y consecuencias diferenciadas.
Justificación, puede referirse a:
Justificación moral. Referente a la Ética
Justificación científica. Referente a los argumentos científicos
Justificación lógica: Referente a los conocimientos como válidos
Justificación (religión). Referente a la salvación del pecado en orden a justificar la entrada en el paraíso después de la muerte, en muchas religiones
Justificación. (2008, 4) de mayo. Wikipedia, La enciclopedia libre. Fecha de consulta: 09:48, agosto 10, 

VALORES



La génesis del valor humano se desprende del vocablo latín aestimable que le da significación etimológica al término primeramente sin significación filosófica. Pero con el proceso de generalización del pensamiento humano, que tiene lugar en los principales países de Europa, adquiere su interpretación filosófica. Aunque es solo en el siglo XX cuando comienza a utilizarse el término axiología (del griego axia, valor y logos, estudio).
En los tiempos antiguos los problemas axiológicos interesaron a los filósofos, por ejemplo: desde Sócrates eran objetos de análisis conceptos tales como "la belleza", "el bien", "el mal".
Los estoicos se preocuparon por explicarse la existencia y contenido de los valores, a partir de las preferencias en la esfera ética y en estrecha relación, por tanto, con las selecciones morales, hablaban de valores como dignidad, virtud..
Los valores fueron del interés además de representantes de la filosofía como Platón para el cual valor "es lo que da la verdad a los objetos cognoscibles, la luz y belleza a las cosas, etc., en una palabra es la fuente de todo ser en el hombre y fuera de él" (2)
A su vez Aristóteles abordó en su obra el tema de la moral y las concepciones del valor que tienen los bienes.
En el Modernismo resurge la concepción subjetiva de los valores, retomando algunas tesis aristotélicas. Hobbes en esta etapa expresó: "lo que de algún modo es objeto de apetito o deseo humano es lo que se llama bueno. Y el objeto de su odio y aversión, malo; y de su desprecio, lo vil y lo indigno. Pero estas palabras de bueno, malo y despreciable siempre se usan en relación con la persona que los utiliza. No son siempre una regla de bien, si no tomada de la naturaleza de los objetos mismos" (3)
Hasta este momento de la historia de los valores y luego en la axiología burguesa, que se analizará seguidamente, se expresa el significado externo de los objetos para el hombre, se hace un análisis idealista subjetivo, y desde este punto de vista los valores se fetichizan o se reducen a propiedades naturales.
En la segunda mitad del siglo XIX, con la agudización de las contradicciones propias de la sociedad capitalista, es cuando el estudio de los valores ocupó un lugar propio e independiente en la filosofía burguesa convirtiéndose en una de sus partes integrantes.
Los filósofos burgueses aumentaron su interés por los problemas axiológicos. Lo cual estuvo dado por las condiciones concretas de esa nueva sociedad, que conducían a sus ideólogos a justificar el ficticio sistema de valores de la burguesía. Así se aprecia que la necesidad del estudio de los valores ha existido siempre a través de las diferentes etapas históricas, aunque respondiendo a los intereses de clases y a las condiciones concretas existentes.
Max Scheler fue el filósofo burgués que más abordó el tema en esta etapa. Para él los valores son cualidades de orden especial que descansan en sí mismos y se justifican por su contenido. El sentimiento de valor es una capacidad que tiene el hombre para captar los valores. Para Scheler: "el hombre es hombre porque tiene sentimiento de valor".
En igual marco histórico se desarrollaron los clásicos del marxismo, pero no se detuvieron en el análisis de los valores, no los analizaron de forma independiente, aunque sí crearon las bases para una solución científica de este problema. Entre algunas de ellas se encuentran: un profundo análisis crítico de todo el sistema de valores de la sociedad capitalista, que sirve de fundamento para el reconocimiento de los verdaderos valores de la humanidad. El estudio del papel del factor subjetivo para el desarrollo social, esta es la base para comprender el significado de la valoración. En la teoría marxista del capital se analizan los valores económicos. La doctrina leninista acerca de la coincidencia de los valores subjetivos de clase del proletariado con las necesidades objetivas del desarrollo social. También los postulados acerca de la posibilidad de diferentes valoraciones de determinados fenómenos en dependencia de la pertenencia de clase del sujeto valorante. Estos señalamientos y postulados constituyen una guía o fundamento metodológico para la teoría marxista general de los valores.
A fines del siglo XIX y principios del XX con estos aportes del marxismo se comienza a abordar el concepto de valor sobre la base de la relación sujeto-objeto, de la correlación entre lo material y lo ideal. De ahí que la filosofía marxista leninista establezca el análisis objetivo de los valores, a partir del principio del "determinismo aplicado a la vida social, donde se gesta el valor y las dimensiones valorativas de la realidad", es decir, esa capacidad que poseen los objetos y fenómenos de la realidad objetiva de satisfacer alguna necesidad humana.
Precisamente de estas tesis parten todos los filósofos marxistas de la contemporaneidad. En especial los filósofos cubanos que según la literatura consultada, a partir de los últimos años de la década del ochenta, tienen un pensamiento axiológico de corte marxista.
Los valores surgen en la relación práctico - objetal y no en el simple conocimiento de las cosas por el hombre. Son el resultado de la actividad práctico del hombre.
Aunque las necesidades del hombre desempeñan un papel importante en el surgimiento de los valores, no implica que la actividad subjetiva haga que los valores sean también subjetivos pues están determinados por la sociedad y no por un individuo aislado.
En valor también pueden convertirse determinadas formaciones espirituales las ideas, las teorías. Pero aún estos fenómenos espirituales siendo subjetivos por su existencia, sólo se convierten en valor en la medida en que se correspondan con las tendencias del desarrollo social.
De tal forma los valores no existen fuera de las relaciones sociales, de la sociedad y el hombre. El valor es un concepto que por un lado expresa las necesidades cambiantes del hombre y por otro fija la significación positiva de los fenómenos naturales y sociales para la existencia y desarrollo de la sociedad.
De acuerdo con este análisis que hiciera el filósofo cubano José Ramón Fabelo en su tesis de doctorado, se considera que los valores son objetivos, pues expresan las necesidades objetivas de la sociedad, expresión de las tendencias reales del desarrollo social, un resultado de la necesidad histórica.
A fines de los ochenta igualmente otra autora Zaira Rodríguez aborda los valores con una diferenciación entre los valores de las cosas (valores objetivos) y valores de la conciencia (valores subjetivos).
Primeramente esta concepción se refiere a bienes y materiales naturales, valores de uso, al carácter progresivo o reaccionario de los acontecimientos históricos, a la herencia cultural y a las características estéticas de los objetos.
En el segundo caso se trata de valoraciones, situaciones y actitudes, representaciones normativas, así como del sentido de la historia de los ideales y principios.
De esta forma para Zaira "los valores como objetos o determinaciones espirituales no son otra cosa que la expresión concentrada de las relaciones sociales."(4) Por lo que finalmente los valores para Zaira tienen un carácter objetivo.
En la actualidad, a través de la década del noventa, las condiciones se han trasformado, han cambiado. De ahí que el pensamiento filosófico capte las actuales condiciones, confirme así el carácter histórico concreto del valor, y ofrezca nuevas tesis.
Exactamente el 8 de octubre de 1995 fue convocada una audiencia pública, por la asamblea nacional, en la ciudad de Santa Clara. Donde Fabelo expone un concepto de valor más diferenciado, más amplio, aunque mantiene su esencia objetiva.
Establece ahora tres planos de análisis: el primero son los valores objetivos, como las partes que constituyen la realidad social tales como: los objetos, fenómenos, tendencias, ideas, concepciones, conductas. Estos pueden desempeñar la función de favorecer u obstaculizar la función social, respectivamente será un valor o un antivalor. Este es un sistema de valores objetivos.
El segundo plano es un sistema subjetivo de valores y se refiere a la forma en que se refleja en la conciencia la significación social ya sea individual o colectiva. Estos valores cumplen una función como reguladores internos de la actividad humana. Pueden coincidir en mayor o menor medida con el sistema objetivo de valores.
El tercer plano es un sistema de valores institucionalizados, que son los que la sociedad debe organizar y hacer funcionar. De este sistema emana la ideología oficial, la política interna y externa, las normas jurídicas, el derecho y la educación formal. Estos valores pueden coincidir o no con el sistema de valores objetivos.
Aunque el proceso subjetivo, de concientización de un determinado sujeto, es importante, no es ajeno a los otros dos momentos. Pues los valores que se forman son el resultado de los valores objetivos y los socialmente institucionalizados.
En la audiencia pública otros estudiosos del tema, la formación de valores, expusieron sus criterios desde diferentes ópticas, además de Fabelo desde el punto de vista filosófico, estuvo Cintio Vitier desde el histórico, María Isabel Domínguez desde el sociológico, Fernando González Rey desde el psicológico y Gilberto García desde el pedagógico. Este hecho fue precisamente para analizar las causas y consecuencias de las transformaciones que ocurren hoy en nuestra sociedad. Es un llamado a resolver las dificultades de nuestro bastión mas fuerte, la moral revolucionaria.
Un análisis de las causas de dichas condiciones implica recurrir al análisis de los factores externos: La caída del campo socialista y en especial la URSS es una de ellas. Este fenómeno histórico provocó una desestabilización económica en el país. Se perdieron mercados y precios seguros por los productos, financiamiento externo, y relaciones de integración por más de treinta años. Esto ha traído consigo internamente carencias materiales y el bajo nivel de satisfacción de las necesidades materiales. Lo que provoca la disminución del valor a los fenómenos espirituales, sociales y se le conceda mucho más valor a los que se asocien a la satisfacción de necesidades materiales.
En el aspecto político-social estos países representaban un paradigma social por lo que este fenómeno hizo que se destruyeran patrones valorativos, de comparación, es decir, desaparecieron las virtudes de aquello a lo que se aspiraba, se derrumbaron las aspiraciones, las ilusiones y ese ejemplo quedó desacreditado.
Al derrumbe del socialismo le sucedió la unipolaridad política, que engendró manifestaciones ideológicas negativas, y esto influye sobre la juventud cubana que no está ajena a la crisis universal de valores que impera hoy en el planeta.
A esto se une la agresión ideológica del imperialismo, que desde los inicios de la Revolución ha estado dirigida a subvertir los valores de la conciencia de nuestro pueblo y en especial de la juventud. En esta se ha dado una transformación en el deterioro de valores, no sólo de los que se identifican con una ética de la Revolución, como el colectivismo, sino incluso valores morales universales como la honestidad, a los que se superponen la doble moral, y el utilitarismo.
Luego de la audiencia pública tuvo lugar un debate público donde Armando Hart dijo: "hablar de valores en Cuba es pensar en el siglo XXI"
De manera que serán los jóvenes de hoy los que decidirán el futuro de la Revolución, de nosotros depende en gran medida el triunfo o no de esa verdad que llevamos adelante.
En nuestro país de manera general existe una juventud que es heredera de valores como la independencia, la solidaridad, y la justicia social. Sin embargo, en una parte de esa juventud pueden observarse síntomas evidentes de crisis de valores. Entre los síntomas están los siguientes: inseguridad acerca de cual es el verdadero sistema de valores, que considerar valioso y que antivalioso, sentimiento de pérdida de validez de lo que hasta ahora era valioso y por tanto atribución de valor a lo que hasta entonces era antivalioso, cambios en el sistema jerárquico, otorgándole mayor prioridad a valores que eran más bajos.
Pero se considera que no se ha producido una crisis total del sistema de valores; si no que estos síntomas indican un debilitamiento de determinados valores, en determinados grupos sociales dado un proceso de reordenamiento, o reacomodo económico.
Este hecho no había ocurrido nunca antes desde el triunfo de la Revolución, por lo que la situación actual se hace preocupante a pesar de que responde a las condiciones concretas, y más aún si se prevee que la tendencia pudiera continuar en aumento.
Esto hace que el reto fundamental de estos momentos sea lograr que el reajuste económico, que implica la actual situación de crisis económica, que es el factor que en última instancia determina los demás, debe ir acompañada de una transformación ética. En la que se preserve lo más valioso de la moral revolucionaria y se abandonen dogmas y estilos caducos.
Esta solución ética es extraño que se tome en algún lugar del mundo, pero no porque no sea necesaria, sino por el contrario dado lo imprescindible que resulta este tema ante la realidad que vive hoy este mundo globalizado. No obstante en nuestro país reafirmamos "que la solidaridad es más rentable que el egoísmo, que el costo de la codicia es superior al de la generosidad, que la eficiencia basada en la administración democrática es superior a la genialidad de cualquier burócrata y que el economismo no puede ser la supraideología de una nación que aspira a seguir siéndolo con todos y para el bien de todos". (5)

ASPECTOS DE LA ACCION HUMANA

La moral se ocupa de las acciones humanas. Las verdaderas acciones humanas son aquellas que dimanan de la libre voluntad del hombre.
¿Pero el hombre es verdaderamente libre? Ciertamente sí, inequívocamente: puedo querer una manzana o una pera, o también no querer nada. Los distintos condicionamientos (familia, escuela, costumbres) en la mayoría de los casos no quitan la libertad, pero la pueden limitar. Por lo tanto es necesario afirmar que la libertad de base permanece, y todos tenemos la experiencia, no obstante los condicionamientos, de que podemos obrar según nuestro arbitrio.
Admitiendo, pues, que la verdadera acción humana es aquella que es libre, la moral no mira si nuestra acción es importante o no, si es eficaz o no, si es aplaudida o no. Lo que cuenta para la moral es si la acción que estamos realizando es buena o mala. Decir por tanto que las acciones son morales o inmorales equivale a decir que las acciones son buenas o malas.
Todas las parábolas de Jesús, en particular la del buen samaritano (Lc. 10, 30ss), indican cuáles son las acciones buenas que se han de hacer, y cuáles las malas que se han de evitar.

jueves, 27 de junio de 2013

MOTIVOS,INTENCIONES FINES,ETC

MOTIVO:
1   Causa o razón que justifica la existencia de una cosa o la manera de actuar de una persona.
2   Forma o figura que se repite en un dibujo o adorno.
3   Figura breve de una composición musical que forma una unidad melódica, rítmica y armónica y que se va repitiendo y desarrollando de distintas formas a lo largo de la pieza: es célebre el motivo con que Beethoven inicia su quinta sinfonía.
intenciones:
f. Propósito o voluntad de hacer algo:
no era mi intención molestarte.
Sobrentendido, dicho o hecho que va más allá de lo evidente:
palabras llenas de intención;
me sonrió con intención.
segunda o doble intención Proceder equívoco y solapado:
no te fies de sus buenas palabras porque estoy segura de que oculta segundas intenciones.
En algunos animales, malos instintos.

FINES:
1. finaltérmino momento en que deja de existir, ocurrir o funcionar algo El programa llegó a su fin.
fin de año - último día del año Organizaron la fiesta de fin de año.
fin de semana - periodo de la semana que comprende los dos días no laborales Nos iremos el fin de semana a descansar.
2. propósitointención motivo por el que se hace o dice algo determinado El fin del viaje era conocer la ciudad de mis padres.
a fin de - se usa para introducir el término de una acción Invirtió dinero a fin de obtener mejores recursos para su futuro.
a fin de cuentas o al fin y al cabo - introduce una explicación que justifica, disculpa o apoya una determinada cosa Al fin y al cabo, nadie salió perjudicado.
dar fin - dar por terminado algo Dieron fin a la relación.
sin fin - que es muy abundante beneficios sin fin




RESULTADOS:
efecto y consecuencia  de un  efecto o operacion y deliveracion 



CONSECUENSIA  DE LAS ACIONES
Acción y consecuencia La acción y la consecuencia, siempre van de la mano y es por ello que se debe contemplar primero la consecuencia previo al accionar; de todos modos existen los imponderables, que por mas que uno intente, no puede controlar. Si tomamos como referencia una explosión, la expansión de la onda explosiva provocará sin lugar a dudas un daño colateral; no solo de una explosión material hablo, sino de las explosiones verbales, discusiones, que en el momento de febril  enfrentamiento, no se tiene en cuenta el daño a futuro que se hace, porque luego se rebobina todo y aunque uno quiera cuesta perdonar, por lo tanto lo aconsejable es fijarse muy bien que palabras decir en duros momentos de discusión; hubo casos que incluso se han llegado a la utilización de armas, tanto blancas, como de fuego, para terminar con la cuestión, y ocurrió que uno de ellos fue muerto por el otro y el otro fue a parar a la cárcel por varios años, como ven el resultado fue totalmente negativo, dejando ambos a sus familias destrozadas, y todo por no medir las consecuencias de sus acciones. La violencia de cualquier orden, no conduce absolutamente a nada y antes de entrar en cólera, ya se ha dicho muchas veces conviene contar hasta diez.
                                       
Fuente: http://es.shvoong.com/humanities/1765949-acci%C3%B3n-consecuencia/#ixzz2XT8gr6gQ

CRITERIOS PARA DISTINGUIR LO" BUENO Y LO MALO "

LO BUENO Y LO MALO
La gran pregunta de la ética es porqué deberíamos actuar considerando a los demás más allá de nuestro beneficio personal. Lo que se deriva de una pregunta aún más profunda: ¿Porqué debo respetar a los demás o sentir algo de compasión con ellos? Nuestra respuesta a estas preguntas morales es muy importante, pues determinará qué decidimos como mejor para nosotros y la manera en que nos relacionamos con las demás personas.

El filósofo Alan Watts dio una vez una conferencia a un grupo de militares sobre por qué debemos actuar de manera moral. Empezó así - parafraseando -: "Ustedes son hombres que han vivido mucho así que no nos irémos con sentimentalismos. Saben cuán duras son las cosas. La verdad es que yo solo me importo a mí mismo. Los demás solo me interesan para que hagan lo que deseo. Pero ¿a qué me refiero cuando digo "yo"? La abeja no se piensa a sí misma sino en relación al panal. Yo está complamente ligado a Otro. Sin el otro no hay un yo. Se trata de una unidad. Un sistema. El otro es parte de mí".

Tras sus palabras se esconde el sentido de comunidad. No podemos comprendernos a nosotros si no es en relación a los demás y el mundo. Eso es un hecho. Eso no significa que nosotros seamos el concepto que los demás tengan de nosotros, así como los otros no son necesariamente el concepto que tenemos de elllos. Sino que parte de lo que decimos cuando decimos "yo" es el otro.


Por otra parte, conocemos bien la frase "el valor de las personas". Todas las personas son valiosas. ¿Pero porqué? No todas tienen el mismo status, ni merito ni desarrollo moral o intelectual. ¿Todas las personas valen lo mismo? Evidentemente en un rincón de box el mejor peleador es el más valioso, pero no persona, sino como peleador. En un ambiente académico, el más intelectual más entendido es el más valioso, como intelectual y no como persona. Reconocer que todas las personas tienen un valor básico universal nos permite también aceptarnos a nosotros mismos y poder perdonar y perdonarnos. El valor intríseco a los derechos fundamentales como la vida y dignidad está en todos sin excepción, así el otro no respete su propia vida y dignidad no significa que tenga derecho a ir en contra de su vida o dignidad.

El reconocimiento de que el mundo no es algo que especto sino un sistema del que soy parte y el reconocimiento de que todos tenemos un valor intríseco son los sólidos argumentos que justifican sentirse parte de lo que se llama seres humanos. Cuando estos conceptos están claros emergen por sí solos la compasión y la bondad como valores fortalecedores de la autoestima y de la búsqueda no de aquello que me haga gozar más en el momento sino de lo que sea más significativo y profundo. Por lo tanto lo malo es aquello que va en contra del sentido de comunidad, y lo bueno, a favor y es preferible el buen actuar frente al mal actuar

"""ÉTICA Y MORAL """

Ética
- Etimológicamente "ética" y "moral" tienen el mismo significado. "Moral" viene del latín "mos" que significa hábito o costumbre; y "ética" del griego "ethos" que significa lo mismo.
- Sin embargo en la actualidad han pasado a significar cosas distintas y hacen referencia a ámbitos o niveles diferentes: La moral tiene que ver con el nivel práctico o de la acción La ética con el nivel teórico o de la reflexión
 Moral es el conjunto de principios, criterios, normas y valores que dirigen nuestro comportamiento. La moral nos hace actuar de una determinada manera y nos permite saber qué debemos hacer en una situación concreta. Es como una especie de brújula que nos orienta, nos dice cuál es el camino a seguir, dirige nuestras acciones en una determinada dirección. La brújula nos indica el camino. En la vida hay que intentar no perder el norte.





Como conclusión: moral y ética se plantean cuestiones distintas. La moral tiene que ver con el nivel práctico de la acción y trata de responder a la pregunta ¿qué debo hacer?; la ética con el nivel teórico de la reflexión y trata de reponder a preguntas del tipo ¿qué es la moral? ¿cómo se fundamenta? ¿cómo se aplica la reflexión a la vida cotidiana?


- Empecemos a hacer ética respondiendo a la primera pregunta: ¿qué es la moral? Para ello definiremos: acciones morales, normas morales, valores morales y dilema moral.




► DIFERENCIAS ENTRE MORAL Y ETICA

Tres Diferencias Principales :

● 1... Mientras que la moral tiene una base social, normas establecidas en el seno de una sociedad, la ética surge como tal en la interioridad de una persona, como resultado de su propia reflexión y su propia elección.

Aunque la ética puede coincidir en su contenido con la moral es decir las normas morales recibidas en la educación, también puede la ética ofrecer una fuerte diferencia en alguna de sus normas, creando asi una serie de conflictos internos en la mentalidad de una persona.

● 2... La segunda diferencia entre ética y moral, ya no está en su contenido sino en el modo como actúan en la conducta de una persona.

La moral es un conjunto de normas que actúan desde el exterior o desde el inconsciente, una motivación extrínseca a la conciencia del sujeto en cambio la ética influye en la conducta de una persona pero desde su misma conciencia y voluntad. No es lo mismo realizar una conducta porque es una obligación impuesta por la sociedad que ejercer esa misma conducta por que “yo estoy convencido de la bondad de esa acción

● 3... La tercera y definitiva diferencia entre ética y moral, está en la palabra valor (como virtud).

En las normas morales impera el aspecto prescriptivo, legal, obligatorio, impositivo, coercitivo y punitivo, Mientras que en las normas éticas destaca la presión del valor captado y apreciado internamente como tal. El fundamento de la norma ética es el valor, mas no el valor impuesto desde el exterior, sino el valor descubierto internamente en la reflexión de un sujeto.

► DIFERENCIAS GENERALES ENTRE MORAL Y ETICA EN RELACION A LA FILOSOFIA

Ya vista las tres diferencias principales especificamente entre la Moral y la Etica, paso a mostrarte las dos diferencias de ambas pero en su relacion con la filosofia misma :

● 1... La ética es el estudio filosófico y científico de la moral y es teórica mientras que la moral es práctica.

● 2... La etica trata sobre la razon y depende de la filosofia y en cambio la moral es el comporamiento en el que consiste nuestra vida.