jueves, 27 de junio de 2013

CRITERIOS PARA DISTINGUIR LO" BUENO Y LO MALO "

LO BUENO Y LO MALO
La gran pregunta de la ética es porqué deberíamos actuar considerando a los demás más allá de nuestro beneficio personal. Lo que se deriva de una pregunta aún más profunda: ¿Porqué debo respetar a los demás o sentir algo de compasión con ellos? Nuestra respuesta a estas preguntas morales es muy importante, pues determinará qué decidimos como mejor para nosotros y la manera en que nos relacionamos con las demás personas.

El filósofo Alan Watts dio una vez una conferencia a un grupo de militares sobre por qué debemos actuar de manera moral. Empezó así - parafraseando -: "Ustedes son hombres que han vivido mucho así que no nos irémos con sentimentalismos. Saben cuán duras son las cosas. La verdad es que yo solo me importo a mí mismo. Los demás solo me interesan para que hagan lo que deseo. Pero ¿a qué me refiero cuando digo "yo"? La abeja no se piensa a sí misma sino en relación al panal. Yo está complamente ligado a Otro. Sin el otro no hay un yo. Se trata de una unidad. Un sistema. El otro es parte de mí".

Tras sus palabras se esconde el sentido de comunidad. No podemos comprendernos a nosotros si no es en relación a los demás y el mundo. Eso es un hecho. Eso no significa que nosotros seamos el concepto que los demás tengan de nosotros, así como los otros no son necesariamente el concepto que tenemos de elllos. Sino que parte de lo que decimos cuando decimos "yo" es el otro.


Por otra parte, conocemos bien la frase "el valor de las personas". Todas las personas son valiosas. ¿Pero porqué? No todas tienen el mismo status, ni merito ni desarrollo moral o intelectual. ¿Todas las personas valen lo mismo? Evidentemente en un rincón de box el mejor peleador es el más valioso, pero no persona, sino como peleador. En un ambiente académico, el más intelectual más entendido es el más valioso, como intelectual y no como persona. Reconocer que todas las personas tienen un valor básico universal nos permite también aceptarnos a nosotros mismos y poder perdonar y perdonarnos. El valor intríseco a los derechos fundamentales como la vida y dignidad está en todos sin excepción, así el otro no respete su propia vida y dignidad no significa que tenga derecho a ir en contra de su vida o dignidad.

El reconocimiento de que el mundo no es algo que especto sino un sistema del que soy parte y el reconocimiento de que todos tenemos un valor intríseco son los sólidos argumentos que justifican sentirse parte de lo que se llama seres humanos. Cuando estos conceptos están claros emergen por sí solos la compasión y la bondad como valores fortalecedores de la autoestima y de la búsqueda no de aquello que me haga gozar más en el momento sino de lo que sea más significativo y profundo. Por lo tanto lo malo es aquello que va en contra del sentido de comunidad, y lo bueno, a favor y es preferible el buen actuar frente al mal actuar

2 comentarios:

  1. Tal ves tenga razon, pero no somos quienes para juzgar en esta vida D:

    ResponderEliminar
  2. Tal ves tenga razon, pero no somos quienes para juzgar en esta vida D:

    ResponderEliminar